INTRODUCCIÓN

A través del presente artículo se ha tenido a bien aportar al proceso de la reestructuración de la malla curricular de la Universidad Nacional de Educación “Enrique Guzmán y Valle”. Los resultados de la investigación formativa y logro de competencias de los estudiantes universitarios ha sido de suma importancia ya que ha permitido indagar los hechos teniendo en cuenta la experiencia de los estudiantes y al mismo tiempo se ha diagnosticado el uso de las estrategias metodológicas empleadas durante el proceso de enseñanza y aprendizaje en la asignatura que estén vinculados con la investigación y el quehacer de los estudiantes universitarios en lo que respecta a la investigación.

En los últimos tiempos de la actividad académica, los docentes y estudiantes han ido tomando mayor protagonismo en el desarrollo de la investigación; en ese sentido, los docentes tienen una visión holista del proceso de enseñanza-aprendizaje, más no el logro de competencias investigativas en los estudiantes del pregrado en relación con los objetivos propuestos en el currículo. Por tanto, el docente de la asignatura de Taller de Investigación debe aplicar estrategias y metodologías adecuadas a fin de que los estudiantes puedan adquirir las habilidades investigativas y lograr su objetivo durante su permanencia en la universidad. La tarea del docente es despertar el interés en los estudiantes el espíritu investigativo con el propósito de que ellos lo apliquen en su vida académica, con autonomía, puesto que la investigación en la Universidad es obligatoria.

Este problema ha sido abordado por los antecedentes de la investigación, tal es el caso de Banderas, Cárdenas y Martínez (2018) quienes sostienen que la acción investigativa requiere manejo y conocimiento de las competencias investigativas, a fin de viabilizar la orientación y el logro de los objetivos que propone el currículo en beneficio de los estudiantes. Teóricamente, la formación investigativa radica en la preparación y orientación de los estudiantes al logro de sus aprendizajes, de manera crítica, reflexiva y creativa, a través de las diferentes motivaciones intrínsecas y extrínsecas con el propósito de generar una autonomía en cada uno de los estudiantes, además de presentar teorías y estrategias metodológicas acorde con sus necesidades. En lo que concierne a competencias, cabe sostener que son aquellas capacidades, habilidades y destrezas que están estrechamente vinculadas a la praxis de los valores, puesto que la investigación requiere de originalidad de parte del investigador.

En última instancia cabe sostener que el objetivo central de la investigación ha sido determinar la relación existente entre las variables investigación formativa y el logro de competencias en los estudiantes de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Nacional de Educación (UNE).

INVESTIGACIÓN FORMATIVA

La presente terminología en primera instancia hace referencia al desarrollo del talento de los estudiantes. Para lo cual, los estudiantes deben recibir e indagar diversas estrategias de manera intencionada, a fin de reforzar su pensamiento crítico, reflexivo y creativo manteniendo un estado motivacional de aprendizaje autónomo y continuo que permita el discernimiento y juicio valorativo sobre temas trascendentales desde su disciplina bajo la estructura del método científico (García, 2015, citado en Estrada y Estrada, 2019).

Por otra parte, el Banco Mundial (2003, citado en Estrada y Estrada, 2019) señala que el recurso humano de un país es de suma importancia para la generación de riqueza y economía; en esa perspectiva, la formación profesional debe incluir la competencia investigativa desde sus primeros años para garantizar la gestión de los conocimientos transdiciplinarios y ser profesionales con una visión transformadora desde la investigación científica en su área.

Dentro de la investigación, el desarrollo de la dimensión formación profesional es articulada al plan de estudios de manera transversal las mismas que se encuentran normadas en las políticas educativas y del perfil de todo egresado, declarando de manera intencional la necesidad de las competencias investigativas desde los primeros ciclos de vida universitaria superior (Universidad Centroamericana, 2010).

Según Restrepo (2010), la dimensión formativa es un fenómeno educativo que conlleva a la adquisición, procesamiento, construcción y reelaboración del conocimiento juntamente a las actividades pedagógicas desde las estrategias de aprendizaje hasta las de enseñanza que articula al docente y estudiante para empoderar la capacidad de plantear, formular, teorizar, desarrollar y comunicar resultados de investigación que sea un potencial en el perfil del estudiante y su futura actuación profesional.

Por otra parte; Pirela, Pulido y Mancipe (2015) afirma que la investigación formativa es un cúmulo de habilidades, conocimientos, actitudes y pericias que desarrollan los estudiantes durante su formación profesional desde sus inicios y que gradualmente se van enriqueciendo con el quehacer de la actividad científica para abordar y problematizar una realidad compleja desde su área de interés.

Entender la investigación formativa como un proceso estratégico que adquiere conocimiento desde una perspectiva pedagógica y científica, donde las capacidades del pensamiento crítico–reflexivo son de ayuda para la identificación de un problema, ya sea empírico o teórico, y luego generar nuevos conocimientos con una capacidad descriptiva, explicativa y predictiva que les permita a los estudiantes descubrir nuevos conocimientos y desarrollar competencias investigativas necesarias para el día de hoy en la formación profesional creando vínculos de parentesco con la comunidad (Finol y Pinela, 2015).

Desde el punto de vista pedagógico, la investigación formativa contempla un marco estratégico de enseñanza-aprendizaje que permite a los estudiantes desarrollar destrezas y habilidades desde los inicios de la vida académica para que vayan familiarizándose con el quehacer investigativo. Por ello, los planes curriculares deben fijar objetivos y logros en la transversalidad formativa no dejando al azar la enseñanza y las competencias tanto genéricas como investigativas para la futura actuación del profesional.

LOGRO DE COMPETENCIAS

El término competencia en la educación, cotidianamente, se suele definir como una facultad que tienen los individuos para ejercer sus capacidades con la finalidad de lograr un propósito propuesto basado en la praxis de ética y moral. Por otra parte, se debe tener en cuenta que el término “competencia” se define en diferentes esferas de la vida cotidiana y la actividad académica. Haciendo un reencuentro del origen del término competencia nos aproximamos al idioma alemán, pues aquella deriva de la palabra Kompetenz, que significa competencia. El término propiamente dicho aparece en el campo de la organización; esta refiere a regular las atribuciones del campo de la administración y las empresas. Por otra parte, se considera como la facultad de tomar decisión conferida en los respectivos titulares (Bunk, 1994). Para el desarrollo de la investigación, se asumirá como la facultad que tienen las personas para lograr sus objetivos propuestos.

Otra de las definiciones acerca de la competencia propuesta por Tejada (2005), quien sostiene lo siguiente:

… el concepto de competencia es que comporta todo un conjunto de conocimientos, procedimientos y actitudes combinados, coordinados e integrados, en el sentido que el individuo ha de saber hacer y saber estar para el ejercicio profesional. El dominio de estos saberes le hacen capaz de actuar con eficacia en situaciones profesionales. Desde esta óptica, no sería diferenciable de capacidad, erigiéndose el proceso de capacitación clave para el logro de las competencias. Pero una cosa es ser capaz y otra muy distinta es ser competente, poseyendo distintas implicaciones idiomáticas (p.7).

Desde la posición de Tobón (2013), la competencia se entiende como “comprensión y autorregulación de cada uno de los procesos para abordar con idoneidad, ética y mejoramiento continuo la actividad o problema del contexto” (p.243).

Asimismo, Tobón (2013) considera los procesos de actuación idónea como la integración de los tres saberes (saber hacer, saber conocer y saber ser), los cuales se considerará como dimensiones del presente trabajo.

Por otra parte, se tiene en cuenta que las tres dimensiones del trabajo están explícitas en función de la mirada de Tobón (2013), que a continuación se describe:

METODOLOGÍA

Se realizó una investigación de enfoque cuantitativo no experimental de diseño correlacional, desde el punto de vista de Hernández, Fernández y Baptista (2014) el desarrollo de esta, permite el manejo y la recolección de datos con la finalidad de probar la hipótesis a través del análisis estadístico. La investigación pertenece al tipo básica puesto que su propósito es el enriquecimiento del marco teórico esclareciendo la relación de las variables. Se denomina no experimental porque no se ha manipulado las variables de estudio, en ese sentido, solo obedece a la observación de parte del investigador al momento de la aplicación del instrumento, por otra parte, el aspecto transversal ha permitido recoger la información en un solo momento a través del Google drive haciendo uso de la herramienta Google form.

El método que se aplicó fue el analítico e hipotético-deductivo, cuyo procedimiento es empleado en toda investigación científica, la misma que permitió la constatación de las variables investigación formativa y el logro de competencias. Por otra parte, Hernández y Mendoza (2018) definen la población como el conjunto de todos los casos que son materia de estudio que coinciden con una serie de detalles. Asimismo, las poblaciones deben ubicarse claramente en torno a sus características de contenido, lugar y tiempo. En tanto la definición, la investigación estimó una población de 3 275 y una muestra 344 estudiantes entre mujeres y varones que pertenecen a las facultades abajo mencionadas de la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle.

De la misma forma se utilizó el instrumento de cuestionario el cual permitió el recojo de las informaciones para el proceso de la correlación entre las variables de estudio. La técnica ha sido la encuesta conformado por 32 ítems de escala tipo Likert.

RESULTADOS

Los resultados dan cuenta de los coeficientes de correlación entre las variables y sus dimensiones detallando las siguientes las interpretaciones de las siguientes tablas:

De acuerdo a la tabla 01 según el coeficiente de correlación Rho de Spearman existe una relación de magnitud fuerte (r = .718) y de tendencia positiva, asimismo, el . valor es menor al grado de significancia estadística (. = .000 < 0.05) en ese caso se confirma que existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el logro de competencias en estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades en la Universidad Nacional de Educación, 2020.

Respecto a los resultados específicos la tabla 02 hace referencia según el coeficiente de correlación Rho de Spearman que existe una relación de magnitud moderada (r = .724) y de tendencia positiva, asimismo, el p valor es menor al grado de significancia estadística (P= .000 < 0,05) confirmando que existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el saber hacer de los estudiantes de la mencionada universidad.

Seguidamente como se aprecia en la tabla 03 existe una relación de magnitud moderada (r = .596) y de tendencia positiva, asimismo el . valor es menor al grado de significancia estadística (P= .000 < 0,05) en ese sentido existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el saber conocer de los estudiantes de la universidad.

Finalmente, según la tabla 04, de acuerdo existe una relación de magnitud moderada (r = .502) y de tendencia positiva, asimismo el P valor es menor al grado de significancia estadística (P= .000 < 0.05) lo que significa que existe una relación significativa entre la investigación formativa y el saber ser de los estudiantes de la mencionada universidad.

DISCUSIÓN

Partiendo de la premisa que la columna vertebral de toda universidad es la investigación y, por ende, la formación competencial recae en esta área transversal que todo estudiante debe desarrollar como arte de su labor profesional. Debe investigar desde su especialidad y debe ser competente en la misma.

En relación con lo anterior, los resultados según la hipótesis general confirman que existe relación altamente significativa entre la investigación formativa y el logro de competencias en estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades en la Universidad Nacional de Educación, 2020, siendo de magnitud fuerte (r = .718) y de tendencia positiva; asimismo, el p valor es menor al grado de significancia estadística (p = .000 < 0,05). Al respecto, Banderas, Cárdenas y Martínez (2018), en su investigación, resaltan que la formación en competencias investigativas constituye un eje primordial de la formación académica de los alumnos. Esto refiere que la investigación formativa debería ser una columna inherente al desarrollo de competencias profesionales, no solo es para investigadores, sino que todo profesional competente es un investigador. En esta misma idea, Espinoza, Rivera y Tinoco (2016) también favorecen estos resultados cuando afirmaron que la formación investigativa se sustentan en la práctica pedagógica y es que la competencia del proceso investigativo busca una autonomía en diferentes individuos, además de orientar a la autorregulación. Por otro lado, la formación de personal pedagogo infantil con competencias investigativas es un profesional competente en su área ante los retos vertiginosos (García y Aznar, 2019). Todo ello implica que los resultados antes mencionados pueden ser extrapolados a otras realidades de formación profesional.

Según el primer objetivo específico (Determinar la relación que existe entre la investigación formativa y el saber hacer de los estudiantes de la Universidad Nacional de Educación), los resultados obtenidos demostraron que existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el saber hacer de los estudiantes, los datos al ser comparados con el antecedente de Espinoza, Rivera y Tinoco (2016), en la que refiere que desarrollaron el trabajo de investigación Formación de competencias investigativas en los estudiantes universitarios, en el cual los autores sostienen que el trabajo de investigación muestra los pasos del proceso de la formación investigativa, las mismas que se sustentan en la práctica pedagógica. A partir de ella, se proporcionará la retroalimentación como una condición práctica para la formación de los individuos. En ese sentido, es que la competencia del proceso investigativo busca una autonomía en diferentes individuos. Los resultados se aseveran con la teoría de Parra (2004), quien estableció tres dimensiones de la investigación de tipo formativa que conlleva a desarrollar las competencias y las habilidades para que el futuro profesional posea las herramientas para una investigación científica de rigor, con creatividad y de alto impacto en la sociedad y desarrollo económico de un país.

Determinar la relación que existe entre la investigación formativa y el saber conocer de los estudiantes de la Universidad Nacional de Educación, tabla 03, los resultados alcanzados indicaron que existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el saber conocer de los estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades en la Universidad Nacional de Educación, 2020. Los resultados coinciden con el estudio realizado por Zelada (2018), quien desarrolló su investigación a partir del siguiente objetivo general: “Determinar la efectividad didáctica de la investigación formativa para mejorar el conocimiento de la Historia y Evolución de la Gastronomía” y concluye que la didáctica de investigación formativa mejoró el conocimiento de la historia y la evolución de la gastronomía en los estudiantes. Asimismo, se sustenta con la teoría de Restrepo (2010), la dimensión formativa es un fenómeno educativo, el cual conlleva a la adquisición, procesamiento, construcción y reelaboración del conocimiento juntamente a las actividades pedagógicas desde las estrategias de aprendizaje hasta las de enseñanza que articula al docente y estudiante para empoderar la capacidad de plantear, formular, teorizar, desarrollar y comunicar resultados de investigación que sea un potencial en el perfil del estudiante y su futura actuación profesional.

El tercer objetivo fue determinar la relación que existe entre la investigación formativa y el saber ser de los estudiantes, los resultados de la tabla 04 indican que existe una relación directa y significativa entre la investigación formativa y el saber ser de los estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades en la Universidad Nacional de Educación, se coincide con los autores Banderas, Cárdenas y Martínez (2018), en la investigación denominado Perspectivas docentes sobre la formación de competencias investigativas en relación con los programas de asignatura. En este trabajo sostienen que la formación de competencias investigativas implica tener los conocimientos acerca de los procesos de investigación, lo cual implica tener ciertas habilidades metodológicas, además de la praxis de los valores éticos. Del mismo modo, Pirela, Pulido y Mancipe (2015) expresan los datos que apoyan lo señalado en la investigación formativa es un cúmulo de habilidades, conocimientos, actitudes y pericias que desarrollan los estudiantes durante su formación profesional desde sus inicios y que gradualmente se van enriqueciendo con el quehacer de la actividad científica para abordar y problematizar una realidad compleja desde su área de interés.

CONCLUSIONES

Según el objetivo específico 1: Determinar la relación entre la investigación formativa y el saber hacer en estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades, se concluye que existe una relación altamente significativa (p = .000 < 0,05) de magnitud fue (r = .724) y tendencia positiva. Esto nos indica que puntuaciones regulares en la investigación formativa también lo es en el logro saber hacer.

De acuerdo al objetivo específico 2: Establecer la relación entre la investigación formativa y el saber conocer en estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades, se concluye que existe una relación altamente significativa (p = .000 < 0,05) de magnitud moderada (r = .596) y tendencia positiva. Esto nos indica que puntuaciones regulares en la investigación formativa también lo es en el logro saber conocer.

En última instancia, el objetivo específico 3: determinar la relación entre la investigación formativa y el saber ser en estudiantes del IX ciclo de las Facultades de Tecnología, Educación Inicial, Ciencias Sociales y Humanidades, se concluye que existe una relación altamente significativa (p = .000 < 0,05) de magnitud moderada (r = .502) y tendencia positiva. Esto nos indica que puntuaciones regulares en la investigación formativa también lo es en el logro saber ser.

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Notas de autor

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